Este lugar me sienta perfecto. Siempre tengo buena wifi, refrigerios disponibles y un área de bar cómoda. Recuerdo que el personal me dio excelentes consejos sobre donde cenar en mi primera estancia. ¡Regresaré para Año Nuevo!

La ubicación cerca de Hallgrimskirkja es excelente. Sin embargo, el baño era extremadamente pequeño y no muy cómodo.

La limpieza del hotel era impecable, lo que es fundamental para mí durante los viajes de trabajo. El personal fue muy atento desde el momento del check-in, lo que facilitó mucho mi llegada y me hizo sentir como en casa. La ubicación es increíble, justo frente a la iglesia Hallgrimskirkja, y a un corto paseo de los principales puntos de interés. Además, el café y té disponibles en la zona de desayuno son un gran detalle que se aprecia mucho.

La temperatura en la habitación era un poco fría durante las noches.

Ubicación excelente frente a la iglesia, encantadora estructura histórica

No hay ascensor en el edificio!!! Las habitaciones son bastante pequeñas y el baño es incómodamente ajustado. Además, el sistema de tarjetas para las habitaciones puede ser frustrante. Deberían considerar más opciones para mejorar la limpieza.

Ubicación excelente y vistas únicas desde algunas habitaciones.

La falta de ascensor es bastante incómoda, especialmente si llegas con mucho equipaje. El desayuno no es suficiente para el precio que se paga, ya que había pocas opciones y no estaban muy frescas. Además, el baño es pequeño, lo que puede ser un inconveniente durante la estancia.

La ubicación es increíble, justo frente a la iglesia, lo que ofrece unas vistas espectaculares. Además, el ambiente del hotel es cálido y siempre hay café y chocolate de cortesía en la recepción, lo cual es un gran detalle en un clima tan frío. A pesar de que el desayuno era algo limitado, el fácil acceso a tiendas y restaurantes cerca hizo que nuestra búsqueda de opciones fuera sencilla. Disfrutamos de los paseos a pie, ya que muchas atracciones están a pocos minutos, como el puerto o el jardín de esculturas Einar Jonsson.

El personal siempre ayudó con sonrisas.

La ubicación del hotel frente a la iglesia Hallgrimskirkja es excepcional, lo que ofrece vistas encantadoras y fácil acceso a muchas atracciones de Reikiavik. Además, la disponibilidad de café y refrigerios gratuitos las 24 horas añaden un toque de comodidad muy apreciado.

El baño en la habitación era bastante pequeño, lo que hizo que las cosas fueran un poco incómodas especialmente durante el uso diario. También, no hay ascensor, lo que puede ser un inconveniente si llevas mucho equipaje.

La habitación tenía una vista maravillosa de la iglesia, lo cual hizo que mi estancia fuera verdaderamente especial. Además, el ambiente era cálido y acogedor, y el personal siempre estaba dispuesto a ayudar con una sonrisa.

Mejorar la comodidad de las camas sería ideal.

las vistas a la iglesia son espectaculares. la habitación era muy pequeña y un poco incómoda.

me gustaría volver

Habitación acogedora con vista a la catedral. El cuarto tenía ducha, productos de limpieza y buena calefacción. Bien ubicada, con café y chocolate disponibles. Aprecie la amabilidad del personal y las comodidades como toallas, champú y secador. Además, el barrio es tranquilo y con fácil acceso a todo. Todo un detalle que me encantó.

genial ambiente acogedor con vistas impresionantes

cafés gratuitos , excelente ubicación

habitaciones pequeñas

La ubicación frente a la iglesia Hallgrimskirkja es increíble, lo que permite disfrutar de unas vistas espectaculares cada mañana. Además, la habitación que tuvimos contaba con café y snacks disponibles las 24 horas, un detalle que realmente se agradece. El personal fue amable, siempre dispuesto a ayudar y ofrecer recomendaciones sobre lugares para visitar en la ciudad.

Sin embargo, la falta de ascensor es algo a considerar, especialmente si llegas con mucho equipaje. La habitación era bastante pequeña, lo que dificultaba un poco moverse, y el baño también resultó algo incómodo por su diminuto tamaño.

La habitación era bastante pequeña, pero era acogedora y estaba limpia. Tenía unas vistas increibles a la iglesia, lo cual fue genial. Aunque el baño estaba algo ajustado, no era un gran problema. Me gustó que había café y snacks disponibles 24/7, y el ambiente del hotel era cálido gracias a un personal muy amable. La ubicación también ayudó a hacer la estancia más cómoda.

Fue una buena elección para una excursión de fin de semana en Reikiavik con una brillante relación calidad-precio. Agradecí que siempre hubiera personal disponible en el hall para orientarme, ya que soy un poco desorientado. Si tienes equipaje pesado, ten en cuenta que no hay ascensor porque puede ser un inconveniente.